Contextuales
18 de Noviembre de 2019 | 13:58
Economía

¿Realmente necesitas ese crédito?

Aunque no lo queramos ver, la economía de la cotidianidad está llena de tentaciones y trampas que, de hecho, son bastante peligrosas para nuestra economía del día a día.

Sin darnos cuenta, nuestras ciudades, y en especial los distritos comerciales de estas, se llenaron de ofertas que dictan tentadoras frases como “pago fácil y en cómodas cuotas” “con las tasas de interés más bajas del mercado” e incluso “completamente libre de intereses”  lo  cual resulta de hecho bastante llamativo y hace que más de una tentación se active en nuestro sistema al mismo tiempo.

La peligrosidad de este tipo de publicidades no deriva por sí solo de lo llamativas que en realidad resultan, si no que en su mayoría tienen una letra pequeña y casi invisible que suele dictar “ciertas condiciones aplican”, la cual suele ser ignorada por una gran cantidad de usuarios.

Es en estas donde se esconde la trampa del comercio moderno; este tipo de pagos, en supuestas cómodas cuotas, suele terminar inflando el valor original del objeto bastante por encima del original.

Si bien es cierto que muchas veces este tipo de pagos se vende como pagos con 0% en su tasa de interés, también este tipo de tratos suele significar que el comercio va a devengar un alto porcentaje de interés por conceptos de morosidad en alguna cuota o por incumplimiento de algún pago.

Si bien es sencillo pensar que este tipo de situaciones no deberían presentar inconveniente alguno, lo cierto es que cuando examinamos estadísticamente la duración de estos plazos de pago que muchas veces superan los doce meses es cuando debemos detenernos a pensar en todas las posibilidades que podrían ocurrir en ese lapso de tiempo.

Un simple olvido, un desajuste en el presupuesto mensual, o un simple cambio en los datos de facturación que maneja el banco pueden causar una de estas temidas  demoras en la paga.

Este escenario se vuelve especialmente preocupante debido a las tendencias de compras que han mostrado los adultos jóvenes de la presente generación. Según estudios hechos por comparadores de crédito en WanaCash.es existe un altísimo porcentaje de préstamos y financiamientos que van a parar a adultos jóvenes con la finalidad de complacer caprichos, y otros tantos minicréditos que se solicitan con la finalidad de saldar cuentas pendientes con otras entidades.

Si bien siempre será preferible tener cuentas pendientes con una sola entidad de tipo financiera, lo cierto es que acumular múltiples deudas por concepto de créditos consecutivos es el peor escenario posible para la estabilidad económica de cualquier ciudadano.