Contextuales
26 de Febrero de 2020 | 11:11
Agricultura

¿Fertilizante químico o fertilizante ecológico?

Comenzaremos diciendo qué es cultivar de forma orgánica o ecológica, aunque ya todos lo sabemos, no está de más hacer una breve explicación sobre los cultivos orgánicos; un cultivo orgánico o ecológico sería aquel en el que solo se utilizan abonos y fertilizantes procedentes de la descomposición animal o vegetal y de los desechos de animales de granja, conocidos como estiércol.

Si nos centramos en el cultivo del cannabis ¿cuál sería la mejor opción? ¿un abono cannabis orgánico o un abono cannabis químico?

Puede ser que una gran mayoría se decante por los abonos cannabis de elaboración industrial, preferentemente, porque resultan más baratos que los abonos orgánicos y porque su acción sobre la tierra de cultivo y las raíces de las plantas es más rápida; pero, al margen de estas dos ventajas, vamos a ver a continuación, los beneficios de utilizar abonos orgánicos ecológicos para el cannabis, en lugar de los abonos químicos.

Lo bueno de los abonos para cannabis de origen orgánico es que liberan los nutrientes de forma gradual, y esto, es mucho más beneficioso para la tierra y para las plantas, además de que su acción se prolonga en el tiempo, al contrario de lo que pasa con los fertilizantes químicos.

Otra de sus características más apreciadas, y que cada vez se tiene más en consideración, cosa de la que nos alegramos, es que al utilizar abonos orgánicos ecológicos estamos siendo más responsables o respetuosos con el medio ambiente, al eliminar la emisión de gases nocivos para la atmósfera, en el momento de la elaboración de los abonos fabricados químicamente. 

Por otro lado, la buena calidad del suelo que obtenemos con los abonos naturales, también da como resultado un producto de calidad, ya sea que hablemos de verduras, legumbres, frutas o, como en el caso que en esta ocasión nos ocupa, de la planta de cannabis. El resultado, por consiguiente, será el de una planta totalmente libre de sustancias químicas.

Como hemos comentado al principio de estas líneas, los abonos y fertilizantes químicos son más baratos, pero realmente, vale la pena apostar por lo natural en beneficio de todo y de todos. Es más, confíamos en que, ante un incremento de la demanda, suba la oferta y esto haga que los precios sean más económicos.

Después de lo expuesto, cada cual elegirá la opción que más le convenga. Por lo menos, ya conocemos algo más sobre los abonos orgánicos y los abonos químicos.